
HERMANOS CERVATILLOS....
Con agraciados
brincos,
mis hermanos
cervatillos,
bebían
junto a mis labios,
agua
fresca
del manantial,
y en ese lenguaje
de amor
universal,
nos perdimos
un instante,
extendiéndoles
las lamidas
manos,
en señal
de gratitud.
Liberadas
las patas,
se alejaban
en la espesura
del bosque,
mi corazón
contrito
de lágrimas
albinas,
cuajado
en rezos
sonreía...